Mi yegua
Brilla su pelaje negro
deslumbrando al que la mira,
porque son tan azules sus brillos
porque son tan azules sus brillos
que hasta el mar la tiene envidia
Derrama sus crines al aire
cuando por la playa vuela
“y como el mar no la tolera”
manda borrar sus huellas
a una ola traicionera.
¡Qué bonita que es mi yegua!
¡Con qué cariño me mira,
cuando me voy acercando.
¡Solo quiere que la monte!
¡Solo quiere verme encima.
Y cuando encima me pongo;
me pide que la señale,
solo quiere que la diga
si ha de trotar despacio
o correr con mucha prisa.
Si quiero que lo salte todo
o que a la gente diga
que he terminado mi turno,
con una cabeza hundida.
¡Qué bonita que es mi yegua!
Con que alegría relincha
cuando me ve desde lejos.
¡Qué dulzura en su mirada
cuando se junta a la mía!
