Mis hijos despiertan y juegan un rato,
mientras para el desayuno, yo pongo los platos.
! Que hambre tengo, ya no me aguanto ¡.
! Me como a este niño ¡ ! y yo te acompaño ¡
Venga... ! dejadlo ¡.
No abu --dice mi nieta-- ! otro rato ¡.
Mi pública galeria privada, mi pequeño rincón del arte.
! Madre ! que fuerte y magnánima eres.
Diriges las fuerzas de tus aguas
por intrincados caminos, aunque te arañen
y las dejas descansar en un remanso,
...luego continúan.